El maletín nuclear es una valija cuyo contenido es utilizado por orden del presidente de los Estados Unidos para autorizar un ataque nuclear cuando está lejos de los centros de mando fijos, como la sala de crisis de la Casa Blanca o el Centro de Operaciones de Emergencia Presidencial. Contiene planes y procedimientos para represalias, así como los códigos que permiten activar todas las armas nucleares estadounidenses dispersas por todo el mundo. Por lo tanto, este maletín es un elemento crucial en el sistema de defensa estratégica de los Estados Unidos. Siempre lo lleva un asistente militar que acompaña al presidente en todos sus desplazamientos, tanto dentro como fuera del país. A veces se le conoce con otros nombres, como el maletín presidencial de emergencia, la caja negra o el «balón nuclear» (nuclear football).
Historia del maletín nuclear
La historia del maletín nuclear se remonta a la presidencia de Dwight D. Eisenhower, pero su uso actual surgió después de la crisis de los misiles en Cuba. El presidente John F. Kennedy temía que un comandante soviético con base en Cuba pudiera lanzar misiles nucleares sin la autorización de la Unión Soviética. Kennedy hizo varias preguntas sobre el lanzamiento de las armas nucleares estadounidenses, como si podría ordenar un ataque nuclear sin consultar al secretario de Defensa o al Estado Mayor Conjunto. También se preguntaba cómo se podría verificar la identidad de la persona que emitía la orden. Como resultado, se implementaron varios mecanismos que todavía están en uso hoy en día.
El apodo de «balón nuclear» proviene de un plan de ataque nuclear llamado «dropkick,» en referencia a un término del fútbol americano. Esta asociación a veces ha causado malentendidos sobre la naturaleza del maletín, que en realidad es un gran estuche de cuero, no una pelota de fútbol.
Bajo las presidencias de Jimmy Carter y Ronald Reagan, los códigos de activación nuclear se guardaban en los bolsillos de sus chaquetas. John Kline, quien más tarde sería miembro del Congreso de los Estados Unidos, llevó el maletín nuclear para estos dos presidentes mientras servía como coronel en los Marines.
El maletín ha estado involucrado en varios incidentes notables. Durante el intento de asesinato de Reagan en 1981, la tarjeta que contenía los códigos nucleares fue retirada de su ropa por el personal del hospital y posteriormente fue encontrada por casualidad. En 1973, durante la visita del líder soviético Leonid Brézhnev a los Estados Unidos, el presidente Richard Nixon se alejó del maletín durante casi 30 minutos.
Incidentes y apariciones públicas
El maletín nuclear debe permanecer siempre cerca del presidente. En febrero de 2017, un invitado en el complejo turístico de Donald Trump tomó una foto con el asistente militar que llevaba el maletín y la publicó en Facebook. La foto se tomó durante una reunión entre Trump y el primer ministro japonés Shinzo Abe, mientras Corea del Norte acababa de lanzar un misil balístico sobre el mar de Japón. Este incidente generó preguntas, aunque los funcionarios militares afirmaron que todo estaba en orden.
En enero de 2021, durante el asalto al Capitolio de los Estados Unidos, las imágenes de las cámaras de seguridad mostraron al vicepresidente Mike Pence y al asistente militar con el maletín nuclear siendo evacuados de emergencia. En ese momento, el maletín estaba a solo 30 metros de los manifestantes, lo que planteó un riesgo potencial de compromiso de información sensible. Afortunadamente, no se causó ningún daño.
Contenido del maletín
Según Bill Gulley, exdirector de la Oficina Militar de la Casa Blanca, el maletín contiene cuatro elementos: un cuaderno negro de 75 páginas que describe las opciones de represalias, un segundo libro que enumera los sitios objetivo y los lugares seguros para el presidente, una carpeta que describe los procedimientos del sistema de alerta de emergencia, y finalmente tres tarjetas que contienen los códigos de activación de las armas nucleares.
En 2005, el Washington Post describió el maletín como hecho de metal y con un peso de aproximadamente 20 kilogramos, con una antena visible cerca del asa, lo que sugiere que también contiene equipos de comunicación.
Funcionamiento del maletín nuclear
Si el presidente de los Estados Unidos decide utilizar armas nucleares, los asistentes militares abren el maletín. El presidente discute las opciones de ataque con el secretario de Defensa y el jefe del Estado Mayor Conjunto, y luego se toma una decisión. Los asistentes militares contactan al NORAD para preparar un ataque preventivo y un posible segundo ataque. Luego, los códigos de activación se transmiten a las unidades nucleares preparadas para actuar.
El presidente debe usar un código especial, conocido como «cookies», para verificar su identidad. Aunque el secretario de Defensa no tiene el poder de rechazar la orden del presidente, debe confirmar que la orden es legítima. Las órdenes luego se transmiten a las fuerzas en el campo, que ejercen control directo sobre las armas nucleares.
Aunque el presidente tiene la autoridad para lanzar un ataque nuclear, la ley estadounidense exige que la orden sea legal y conforme a las leyes de la guerra. Los militares pueden negarse a cumplir órdenes ilegales, incluidas aquellas de ataques nucleares. Si un jefe de Estado Mayor se niega a cumplir una orden, el presidente puede reemplazarlo.
Otros países y sus maletines nucleares
Otros países con armas nucleares también tienen maletines similares. En Rusia, el maletín nuclear se llama «Cheguet», y permite a los altos funcionarios comunicarse al tomar decisiones sobre el uso de armas nucleares a través de un sistema llamado «Kazbek». En Francia, no hay un maletín nuclear oficial, pero existe una «base móvil» que sigue al presidente en sus desplazamientos. En India, las armas nucleares están bajo control civil, y cualquier decisión de uso debe ser aprobada por un consejo político.