Fecha: 11 de septiembre de 2001
Fotógrafo: Doug Mills – Associated Press
Detalles: La historia de esta imagen emblemática se remonta a la visita del presidente George W. Bush a la escuela primaria Emma E. Booker en Florida. Estaba allí para participar en un evento de lectura con los estudiantes. Pocos momentos después de comenzar los ataques, el jefe de gabinete de Bush, Andy Card, se inclinó y le susurró la noticia. En una entrevista posterior, el presidente Bush recordó haber experimentado una primera oleada de ira, preguntándose quién podría cometer tal atrocidad contra Estados Unidos. Al mirar a los niños a su alrededor, quedó impactado por el marcado contraste entre los horribles ataques y su inocencia. Notó a los medios de comunicación al fondo del aula siguiendo las noticias en sus teléfonos, lo que hacía que la situación pareciera surrealista, casi como una película muda. Dándose cuenta de que muchas personas fuera del aula estarían observando su reacción, decidió permanecer sentado y tranquilo, sin querer alarmar a los niños ni parecer en pánico.
Después de recibir la noticia, Bush se dirigió a una habitación vacía para recibir actualizaciones sobre la situación de sus asesores. Dos horas después del ataque, hizo una declaración improvisada con algunos de los estudiantes y personal escolar detrás de él. Luego voló de Florida a la base aérea de Barksdale en Luisiana, donde pronunció un discurso prometiendo represalias contra los responsables de los ataques.
El fotógrafo Doug Mills describe los momentos en que capturó la foto. El día había comenzado de manera rutinaria mientras se preparaba para cubrir la visita del presidente Bush a la escuela. Tomó fotos habituales del presidente y los estudiantes. Cinco minutos después del inicio del evento, el jefe de gabinete Andy Card entró, lo cual fue sorprendente ya que normalmente no participaba en tales eventos. Card hizo un gesto con dos dedos que Mills inicialmente no comprendió—si significaba que trabajarían dos minutos y luego se irían o si era una señal para el presidente. Mills sintió que Card estaba esperando el momento adecuado para informar a Bush de la noticia. Rápidamente ajustó su cámara para enfocarse en el rostro de Bush, capturando la foto en ese momento crucial. Después de que el presidente Bush se fuera, Mills envió las fotos a Associated Press. Cuando le preguntaron sobre la reacción de Bush y lo que Card había dicho, Mills respondió que no conocía los detalles precisos, pero que estaba claro que la situación involucraba aviones golpeando las torres gemelas. Más tarde, Mills preguntó a Card qué le había susurrado al presidente. Card respondió: “Señor Presidente… un segundo avión ha golpeado el World Trade Center y América está siendo atacada.”